Llegada una cierta edad el cuerpo comienza a sufrir varios cambios, sobre todo hormonales. Este es el motivo por el que, a finales de los cuarenta, comienzas a sentir determinados síntomas que te acercan cada vez más a la menopausia.
Como todos los procesos, la menopausia tiene diferentes etapas y en este post te mostraremos algunos truquitos para que cada una de ellas sea más bonita y fácil de llevar.
Productos de nutricosmética como Bel Armonía, una buena rutina de ejercicio, mantenerse siempre ocupada y, sobre todo, quererse mucho son algunos de los pilares para que estos cambios se minimicen y no se conviertan en un mundo.
¿Antes de la menopausia?
Como hemos mencionado más arriba, la menopausia es un cambio y proceso hormonal que toda mujer sufre con el paso de los años, pero también dispone de varias etapas: premenopausia, menopausia y posmenopausia. En este post hablaremos sobre la primera etapa, la premenopausia.
Por definición, la premenopausia es un momento de la vida de las mujeres que es un tanto difícil de soportar. Entendido, también, como un período de transición en el que el organismo femenino sufre cambios y desajustes en los ciclos menstruales y, por consiguiente, en el sistema hormonal.
Esta fase suele comenzar a una edad media en torno a los 47 - 48 años y, dependiendo del cuerpo de cada mujer y de su sistema hormonal, los síntomas se harán notar en mayor o menor medida.
Una vez finalizado este proceso, comprendido entre dos y tres años de desarreglos, llegará la menopausia, con la retirada definitiva de la regla.
Consejos para tu bienestar
La premenopausia va de la mano de algunos desajustes hormonales que son un tanto molestos y difíciles de llevar, pero aquí te dejamos algunos consejos para el día a día, los cuales son muy sencillos y te ayudarán muchísimo.
Fomenta la autoestima
Con estos cambios, es inevitable sentirse un tanto sensible y autocrítica, encontrando fallos y defectos a una misma donde no los hay.
Es por ello por lo que debes de mantener una actitud positiva y activa frente a estos cambios. Búscate aficiones o bien retoma aquellas actividades que hayas dejado olvidadas. Seguro que te irá genial.
Ten en cuenta que no siempre se está de buen humor pero, aunque un día de bajón lo tenemos todos, intenta estar alegre y optimista frente a los nuevos acontecimientos que se te presentan.
Realiza ejercicio
El aumento de peso puede ser otro de los efectos de la premenopausia. Debes mantenerte activa, aunque sea caminando 45 minutos al día.
El baile, aerobic, yoga, natación, fitness o el crossfit, que tan de moda está, son algunos de los múltiples deportes que puedes practicar.
No obstante, otros trucos que puedes incorporar en tu rutina son:
- Usar las escaleras en vez de echar mano del ascensor.
- Si es posible, ir al trabajo o a lugares relativamente cercanos andando.
- No utilizar el coche ni ningún transporte público en trayectos cortos.
Realiza controles periódicos y revisiones ginecológicas
Durante la premenopausia es muy recomendable que realices, de forma periódica, revisiones médicas. Si tu salud general está en perfecto estado, los síntomas te afectarán en menor medida.
Otra recomendación es que tu ginecólogo te haga un seguimiento durante el proceso menopáusico y supervise que el sistema está en perfectas condiciones.
Evita el tabaco, la nicotina y cualquier suplemento de hormonas y cualquier otro fármaco de forma automedicada
Muchas veces, por no visitar al especialista, tendemos a automedicarnos, lo que es un grave error.
Antes de tomar cualquier tipo de medicamento o suplemento, debes consultarlo con tu médico de cabecera, puesto que un mal uso puede alterar el proceso y perjudicar tu salud.
Otro hábito que debes evitar es fumar. Sabemos lo que estás pensando y que es muy difícil dejar el tabaco, pero es un beneficio muy grande en este tipo de casos.
Consejos nutricionales
La alimentación y los nutrientes que nuestro cuerpo ingieren es otro de los parámetros a cuidar. Seguir una dieta equilibrada, variada y adecuada a la situación que estás viviendo te ayudará a soportar mejor los cambios hormonales.
A continuación, te mostramos algunos consejos que deberías seguir:
- El desayuno es sagrado. Procura no saltarte el desayuno, este aporta energía y reduce la ansiedad a la hora de comer durante el resto del día.
- Fibra y alimentos integrales. Previenen el estreñimiento y estandarizan los niveles de azúcar y colesterol.
- Legumbres entre dos y cuatro veces por semana. Estas también combaten al colesterol.
- Fruta y verdura. Frescas, tiernas y riquísimas en vitaminas y minerales. Harán que tu corazón esté a la perfección y tengas una piel radiante.
- Evita las grasas saturadas y reduce la sal. Las grasas trans aumentan el peso de manera considerable, el colesterol y son muy poco saludables. Elige mejor las grasas buenas como la de los pescados o el aceite de oliva. También intenta reducir el consumo de sal, mejor sustituirla por cualquier tipo de especia que te guste.
- Moderación de las proteínas, el alcohol y el café. Un alto consumo de carne propicia la acumulación del colesterol. Por otro lado, el alcohol y otros estimulantes harán que te pongas más nerviosa, te suba la tensión y, con ello, aparecerán los sofocos.
- Vitamina D y calcio para tu body. Tus huesos te lo agradecerán y serán más fuertes.
- Y lo obvio… bebe 2 litros de agua diarios. Favorecen la digestión, tendrás una hidratación estupenda y mejorarás tu tránsito intestinal. Además, combatirás la retención de líquidos.
- Los suplementos nutricionales pueden ser un gran complemento para mejorar la salud, aportando las vitaminas y minerales que el organismo necesita.
Así que si estáis en este momento de vuestras vidas y se os está haciendo un poco cuesta arriba, estos consejos ayudarán a que os sintáis más aliviadas y comprendidas.
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