¿Sabías que la piel es el órgano más grande del cuerpo? Eso es debido a que una de sus principales funciones es la de proteger el resto de órganos y sistemas corporales de los factores ambientales externos. Pero esa no es su única función, pues también funciona como un “termostato corporal”. La piel es la encargada de regular la temperatura. Esta función la realiza mediante el sudor, cuando hace demasiado calor, o mediante espasmos musculares cuando hace frío.
La piel registra la mayoría de alteraciones que pueden ser tanto endógenas, como la herencia genética, la salud hormonal o la propia edad, como exógenas, entre ellas las alteraciones climatológicas, la polución atmosférica, calidad de la alimentación, el estrés psicoemocional, u otros factores que afectan al bienestar general de tu organismo como el sueño o la actividad física en tu día a día.
La mayor parte de las alteraciones exógenas forman parte del propio devenir de la vida diaria y nuestro estilo de vida. Como dice la experta en el cuidado de la piel Jana Elston “Tu piel tiene memoria. En diez, veinte, treinta años a partir de ahora, tu piel mostrará los resultados de cómo fue tratada hoy. Así que trátala con amabilidad y respeto.”
Sin embargo, los cambios estructurales cutáneos se deben fundamentalmente a tres factores principales:
- El buen funcionamiento de los órganos internos
- La depuración de toxinas residuales del metabolismo
- El equilibrio adecuado de minerales, enzimas y vitaminas.
No es posible una piel sana, bien hidratada y nutrida, con aspecto joven, si alguno de estos factores está alterado.
Una buena estrategia para mantener la piel sana y joven, consiste en asegurarse de que ciertas partes de tu organismo estén en perfectas condiciones. En lo relativo al cuidado de la piel, el hígado y colon son primordiales. Utilizar depurativos hepáticos y de colon, por lo menos una vez al año, puede ser buena idea si tenemos la sospecha de que las digestiones son lentas o padecemos de dificultades para evacuar con regularidad.
El estrés es otro de los principales condicionantes dañinos para la piel. Nuestro cuerpo utiliza antioxidantes con el objetivo de neutralizar los radicales libres generados por el estrés. Pero cuando hay un desequilibrio entre la capacidad de nuestro cuerpo para combatir sus efectos nocivos y los factores que la producen, estos radicales libres afectan a las membranas celulares de nuestra piel favoreciendo las arrugas y la flacidez.
Una alimentación equilibrada es fundamental para tener una piel saludable y radiante, aunque hay alimentos concretos que potencian un mejor aspecto como la zanahoria o la calabaza, que gracias a sus betacarotenos son fundamentales contra el fotoenvejecimiento, o el tomate, que gracias a sus licopenos ayudan a la piel evitando su rugosidad y aspereza. Pero si hay un elemento que contribuye a una piel saludable es el Omega 3.
El Omega 3 es un ácido graso esencial para el buen funcionamiento de nuestro organismo a nivel general, que además es un gran aporte para nuestro sistema inmune y nos ayuda a controlar los niveles de “colesterol malo”. Pero, sobre todo, es un componente con numerosos beneficios para nuestra piel:
- Repara y regenera la piel
- Reduce enrojecimientos, irritación u el hinchamiento de la dermis
- Mejora la hidratación de la piel
- Es un potente antioxidante
- Protege la piel ante irritantes externos
- Ayuda a mejorar afecciones de la piel como “piel atópica”, eczemas, dermatitis, psoriasis…
El problema con el Omega 3 es que no siempre esta todo lo presente en nuestra dieta como deberíamos para disfrutar de los beneficios de este ácido graso. Sabiendo esto, Nutribel tiene entre sus complementos Bel Omega, un complemento nutricional con el aporte diario de Omega 3 que tu piel necesita para verse sana, joven y radiante.
Igualmente, Collagen Bel también es un magnífico complemento para quienes quieren ver su piel más firme y rellena, pues el aporte extra de colágeno, sumado al ácido hialurónico de su composición, te ayudará a tener una piel más hidratada y tersa al incluirlo en tu rutina diaria.
La salud comienza en el interior, y para ello es fundamental que tengamos el aporte de nutrientes que nuestro organismo necesita para verse estupendo. Mantente atento a nuestras redes sociales para más consejos.
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